Viena

Una ciudad que maravilla

Viena, una oferta cultural por todo lo alto

Con motivo del tricentenario, el Belvedere tomará rumbo hacia el gran año conmemorativo de 2023. Los trescientos años de la construcción del Belvedere Superior serán debidamente celebrados a partir de diciembre de 2022, bajo el lema de "Primavera dorada" y con una amplia serie de eventos y exposiciones.

Además, varias instituciones vienesas abren sus puertas durante el período 2022/23, algunas por primera vez, otras de nuevo. Son novedad el mundo de experiencias virtuales "El mito de Mozart", el Centro Schütte-Lihotzky dedicado a la arquitecta vienesa Margarete Shütte-Lihotzky y el espacio cultural contemporáneo "Lebendiges Haus". Tras su remodelación serán reinaugurados el Josephinum (Museo de historia de la medicina) y el Parlamento.

Parlamento en Viena
Parlamento en Viena
Josephinum (Museo de historia de la medicina)
Josephinum (Museo de historia de la medicina)

Los cafés de Viena

El café vienés es toda una institución en la ciudad. Los típicos cafés vieneses son lugares que destacan por su singular ambiente y sus palcos, sillas Thonet, mesas de mármol, periódicos y cafés en numerosas variantes, ya sea un "Melange" o un "Einspänner". Por eso, la cultura tradicional del café vienés, al igual que la de la taberna vienesa de vinos, forma parte del Patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO.

La Exposición Universal de 1873 no solo dio a conocer al mundo el vaso de agua servido con el café, sino que también el café vienés como local gastronómico, ganó fama internacional, gracias a los numerosos visitantes procedentes de todo el mundo. La época de esplendor de los cafés vieneses tuvo lugar a finales del siglo XIX. Los clientes iban al café a leer, jugar, debatir, filosofar o escribir.

Uno de los más famosos es el Café Landtmann, ubicado en la Ringstrasse de Viena, que fue inaugurado el mismo año que la Exposición Universal. Y para acompañar un buen café la pastelería Demel, antiguo proveedor de la casa imperial y real, atrae al público con las tartas y dulces que ya hacían las delicias de la emperatriz Isabel (la famosa Sisí) y que siguen convenciendo a los visitantes actuales. Doscientos años después de su inauguración, el personal de Demel sigue siendo exclusivamente femenino (las llamadas "Demelinerinnen") y lleva un uniforme blanco y negro. Y no se dirigen al cliente de forma directa, sino que usan la forma tradicional de la casa de tratar al cliente individual en la tercera persona del plural: "Haben schon gewählt?" (¿Ya han escogido?).

Texto: Turismo de Viena. Fotos: Peter Rigaud, Christian Stemper, Paul Bauer, Julius Hirtzberger y Reiner Riedler.