Los vehículos eléctricos
necesitan más puntos de recarga
El déficit de puntos de recarga lastra el desarrollo del coche eléctrico en España
LOS ELÉCTRICOS CUESTAN DE ARRANCAR
Prácticamente a la cola de la electromovilidad europea
Los datos son inapelables, España no consigue encontrar (o no lo busca con suficiente interés) el camino para que los compradores se decidan por vehículos eléctricos 100%, a pesar de que la oferta del mercado empieza a ser considerable e interesante y la inversión de los fabricantes por conseguir mejorar los eléctricos es notable. ¿Por qué ocurre? A ver si te lo podemos explicar bien. Nos hemos basado en datos de ANFAC sobre todo y de AEDIVE, en nuestra experiencia y un poco de opinión.
POR TONI VELÁZQUEZ – OCTUBRE DE 2023 - FOTOS PRENSA AUDI, CUPRA Y CITROËN
Tres son los factores básicos que hacen que nos planteemos comprar un eléctrico 100%: precio, autonomía y puntos de recarga.
El caso es que, aunque la UE ha suavizado (o mejor dicho ha cedido a las presiones de la industria y las Administraciones más potentes como Alemania) la normativa Euro7 sigue siendo muy exigente y los fabricantes se ven obligados a invertir y desarrollar coches eléctricos en detrimento de los de motor térmico, incluidos los híbridos. Si algo es seguro es que se van a perder miles de puestos de trabajo, y se apela a la conciencia ecológica de todos los ciudadanos, con lo cual los compradores se encuentran en una tesitura difícil de solucionar.
Precios altos
Está claro que los eléctricos son más caros que su 'homólogo' en propulsión térmica, aunque sea híbrido. Pongamos un par de ejemplos:
* Peugeot 208 GT Hybrid 136 CV, 27.000 € - Peugeot E-208 GT Eléctrico 156 CV con 400 km de autonomía, 38.500 €
* Opel Corsa 1.2 Turbo 100 CV GS, 21.000 € - Opel Corsa-e Edition Eléctrico 136 CV batería 50 kWh de 352 km de autonomía, 32.500 €
Si bien como es lógico el mercado ya diferencia denominaciones de sus vehículos eléctricos respecto a los de un segmento prácticamente igual, estos dos ejemplos nos dan una idea de la diferencia de precio entre unos y otros.
Y siguiendo con los precios, las ayudas a la compra de vehículos por parte de las administraciones, sobre todo estatal pero también de las comunidades autónomas, deja mucho que desear, y eso supone un freno más.
Autonomía
Otro factor a tener muy en cuenta es la autonomía. Depende de diferentes factores: peso total del vehículo -en el que las baterías y su distribución son muy importantes-, potencia del motor o coeficiente aerodinámico, pero principalmente de las baterías, porque a mejores baterías mayor autonomía, es evidente.
Hay algún coche como el chino Zeekr 001 que puede alcanzar los 1.000 km de autonomía, pero es una clara excepción, y aunque empieza a ser habitual encontrar en el mercado los que superan los 500 km (por ejemplo el Cupra Born -ver novedad-) o los 600 (como el Ford Mach-e -ver prueba-) o que quedan cercanos como el Q8 Sportback e-tron, la mayoría está entre 300 y 450 km, y siempre dependiendo de los tipos de recorrido, de la conducción y que en invierno generalmente reducen su autonomía.
Aun así, rápidamente se están presentando coches que van mejorando las baterías y aumentando la autonomía, y no solo de marcas premium.
El enorme problema de los puntos de recarga
Pero necesariamente debemos centrarnos en el mayor problema para quien piensa comprar un eléctrico 100%: los cargadores y su capacidad de recarga. Por muchas aplicaciones que tengamos instaladas para saber dónde podemos recargar en el recorrido que tengamos previsto, la realidad es que tenemos que estar pendientes de si llegaremos al nuevo punto de recarga o no; eso supone un estrés que pone nervioso/a cualquiera.
Por mucha autonomía que tenga el coche, la red de cargadores es claramente deficiente, y más de cargadores rápidos. Si no lo podemos cargar como haríamos con uno de combustión en una gasolinera, con relativa rapidez y sin posibles colas que se van alargando, de poco nos sirven.
Hay que decir que las marcas premium suelen tener sus propios puntos de carga (en la foto de apertura, un Audi cargando).
VEAMOS ALGUNAS COMPARATIVAS DE INTERÉS
Puntos de recarga, España de lo peor de Europa
Para empezar, comprobemos uno de los datos más relevantes, el de puntos de recarga por habitante, dato que ofrece AEDIVE:
País Puntos de recarga
por cada 100.000 habitantes
Unión Europea 35
Países Bajos 180
Alemania 150
Francia 125
Italia 100
Reino Unido 90
Bélgica 75
Dinamarca 60
España 26
Por tanto, 'la primera en la frente' ya que es un dato muy negativo.
Indicador infraestructura de recarga sobre población motorizable en el global de Europa
También es relevante conocer los puntos de recarga respecto a la población motorizable (la que se desplaza mediante un vehículo de motor), ya que no nos centramos solo en la población en general, que puede entenderse como injusto por muchas personas, sino que concretamos más con esta gráfica de ANFAC. Terceros por la cola.
Evolución del mercado electrificado en los últimos años
Comprobemos también la evolución del mercado electrificado
entre 2018 y 2022, de nuevo con datos de ANFAC. En España ha aumentado un 9,6%,
por lo que, una vez más, se queda lejos de la media europea del 21,6 %, la
misma que Francia, o de nuestro otro vecino Portugal, que ha sido del 21,7 %,
y no digamos del 31,4 % de Alemania.
POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS
Mapa de los puntos de recarga en España por Comunidades Autónomas
Casi el 58% de los puntos de recarga lo copan Catalunya (20%), Comunidad de Madrid (15%), Andalucía (12,25%) y la Comunitat Valenciana, con un 10,50%, que, hay que decirlo, va directamente relacionado con la población de cada CCAA, excepto Andalucía, que es la más poblada pero no la que más puntos de carga tiene.
Catalunya lidera este ranking, a distancia de Madrid, pero eso puede variar pronto, ya que el cambio de las flotas de coches de las administraciones, que en el caso de Madrid es superior, tienen la obligación legal o como mínimo moral de comprar vehículos eléctricos. Habrá que seguir este tema. Fuente ANFAC
Sin mantenimiento no hay recargas que valgan
Por muchos puntos públicos de recarga que existan (que no es el caso), si una buena parte, concretamente un 30%, está fuera de servicio, da para reflexionar. Son datos de ANFAC del segundo trimestre de 2023. Llegar a un punto de recarga confiando en que funcionará porque lo hemos visto en la APP y que no sea así, pone de los nervios y nos puede dejar literalmente 'tirados'.
POR CATEGORÍAS DE RECARGA
Puntos de recarga, clasificados en tres (casi cuatro) categorías según
su potencia
Seguimos con más cosas importantes de los cargadores, porque no es lo mismo una carga rápida (o incluso súper rápida, normalmente relacionada a los fabricantes premium) que una carga lenta; es cuestión de tardar minutos u horas, de poder seguir la ruta mientras tomamos un café o una comida o de esperar horas.
Respecto a este tema, diferenciamos los siguientes tipos de carga:
Carga lenta: hasta 7 kW.
Carga semi-rápida: de 7 a 22 kW.
Carga rápida: superior a 22 kW.
Los más habituales, los lentos
Si nos atenemos a las estadísticas (fuente AEDIVE), los puntos de carga lenta son los mayoritarios, que generalmente son los que se utilizan en casa o en el trabajo; en casa, para cargar el coche durante la noche y en el trabajo durante el día, y los rápidos o súper rápidos en trayectos largos, aunque también los podemos encontrar alrededor de las grandes ciudades, básicamente, con marcas premium.
Veamos la distribución respecto al total:
El 70% de los puntos de carga públicos son de carga lenta.
El 30% de los puntos de carga públicos son de carga semi rápida o rápida
PRECIO Y TIEMPO DE ESPERA
El precio de cargar las baterías y el tiempo de carga
A quienes están pensando comprar un coche eléctrico, a menudo no tienen muy claro cuánto cuesta en euros cargar las baterías. Según AEDIVE, el coste de cargar un coche eléctrico depende de la potencia del cargador, del consumo del coche y del precio de la electricidad. En general, cargar un coche eléctrico cuesta entre 0,20 y 0,40 euros por kWh, pero el precio de los cargadores rápidos y súper rápidos es superior como es lógico.
Hay que tener muy en cuenta lo que tenemos que esperar para la recarga. Los tiempos de carga de un coche eléctrico dependen de diferentes factores, sobre todo por el tipo de cargador (Info Repsol):
- Con los cargadores domésticos, generalmente lentos, suele tardar de 4 a 8 horas; la potencia mínima es de 3,7 kW, que es la que tarda más, y la recomendable es la de 7,4 kW, con la que tardaremos 4 horas.
- Con carga semi rápida podemos tardar entre 1 y 3 horas, dependiendo de la potencia y la capacidad de la batería. Los cargadores de este tipo son de 11 o de 22 kW.
- La carga rápida ya es otra historia, porque permite cargar el 80% en unos 30 minutos; son cargadores de 50 kW.
- También podemos encontrar carga ultra rápida, de 150 kW, aunque son muy pocos los puntos de recarga de este tipo y son muy pocos también los coches que pueden utilizarlos. En solo 5 a 10 minutos tendremos la batería llena.
CONCLUSIONES
- Si asumimos, porque no hay otro remedio, que nuestro próximo vehículo será eléctrico, esperemos que los precios de venta, aunque sea con importantes ayudas europeas, estatales o de las CCAA, se ajusten a nuestro bolsillo, acostumbrado al precio de los de combustión.
- Que el problema de los puntos de recarga se solucione, y que los de carga rápida sean los habituales.
- Que se dé solución también a cómo cargar en ciudad, donde se concentra la mayor parte de la población.
- Las actuales autonomías de los eléctricos tienen que ir aumentando necesariamente y lo antes posible, y que la tecnología aplicada a los coches de alto nivel se vaya aplicando también a los más asequibles.
- Y que el cambio inevitable de las fábricas hacia cadenas de montaje para eléctricos, con el que se perderán miles de puestos de trabajo, se haga de una manera paulatina.