VW GOLF 8 GTI

                                                                                                                                                                                                                  Lo hemos probado con el motor de 245 CV y cambio DSG de 7 velocidades

Sin sorpresas, es decir, mejor cada día

Los que hemos admirado el Golf GTI desde que nació en 1.976 (del que se han vendido nada menos que 2,3 millones de unidades), vamos viendo cómo una generación tras otra, y van 8, nunca decepciona, al contrario. Deportivo, conectado, seguro, da gusto conducirlo y apasiona en general y en carretera en particular.

POR TONI VELÁZQUEZ. FOTOS PRENSA VW Y T. VELÁZQUEZ

GTI son unas siglas que se han asociado desde hace mucho tiempo a un coche y una conducción deportivos. Que, a estas alturas, 45 años después, sigamos asociando GTI no solo al Golf sino a la más alta conducción deportiva quiere decir que Volkswagen le ha dado la importancia que merece y ha conseguido mantener (con la enorme competencia de hoy en día) su esencia deportiva.

Diseño exterior centrado en la aerodinámica

En cuanto al diseño exterior, estamos frente a variaciones poco apreciables a primera vista, pensadas sobre todo para mejorar el coeficiente aerodinámico, un concepto que cada vez resulta más importante. Importante porque a la vez que ayuda a una imagen sutilmente más deportiva, gracias a que es más baja y alargada, y, a la vez, y más destacable, que consigue un Cx de 0,275, mejorando en un 8% el coeficiente interior.

Y si hay que destacar alguna cosa, la parte inferior del frontal tiene una entrada de aire de color negro en forma de panal de abeja y unas llantas "Richmond" de 17 pulgadas diseñadas especialmente para la octava generación del Golf. También dan un toque deportivo el doble escape y los faldones.

Veamos el interior

Los asientos tipo 'bucket' con los apoyacabezas integrados ayudan, y mucho, a que el aire deportivo del coche también se perciba en el interior, además de que son cómodos.

El volante multifunción es nuevo y personalizado con las siglas GTI. Llevamos el cuadro de instrumentos digital 'Cockpit', que podemos cambiar sin problemas solo con apretar la tecla "view", que está en el volante; uno de los gráficos es el GTI (ver foto).

El coche permite personalizar el sonido del motor, algo cada vez más habitual, y también podemos elegir entre 30 colores distintos, entre ellos una iluminación especial GTI.

La pantalla central es táctil de 10 pulgadas, y este Golf 8 incorpora Innovision Cockpit, para una mejor visualización. También dispone del sistema avanzado de infoentretenimiento 'Discover Media'.

Pero no necesitaremos mirar a la pantalla central si no es necesario y podremos seguir con la vista puesta en la carretera, ya que cuenta con Head Up Display, con la información más destacada proyectada en el parabrisas; un HUD no muy grande pero suficiente por la calidad de las imágenes.

El habitáculo es espacioso, y en cuanto al maletero, tiene una capacidad de 374 litros, aunque con los asientos traseros abatidos llega a 1.230; es un portaequipaje no muy grande, pero en la línea de otros compactos como el SEAT León (380 litros), por tanto, suficiente para cualquier viaje.

Lo probamos

Las expectativas son altas, está claro. Sabemos que tenemos bajo el capó un motor de 240 CV de potencia y 370 Nm de par, con una aceleración de 0 a 100 km en 6,3 segundos. En cuanto al par, mejora en esta generación, ya que lo prolonga de 1.600 a 4.300 rpm. Si es importante la potencia y el par, también lo es la transmisión; en nuestro caso, llevamos cambio automático DSG de 7 velocidades, un magnífico cambio del que ya hemos hablado en varias ocasiones; podemos cambiar si queremos, a nuestro criterio gracias a las levas tras el volante.

Estamos en marcha, enseguida percibimos una dirección muy precisa y notamos como si el coche fuera sobre raíles. Depende de nuestra experiencia y seguridad como 'pilotos' aumentaremos el ritmo (dentro de los límites legales), pero tengamos mayor o menor experiencia, la tecnología que nos acompaña es impresionante. Hay que hablar del Gestor Dinámico de Marcha, que, tal como explican en VW "interconecta los componentes electromecánicos del tren de rodaje, que permite controlar el ESP con bloqueo electrónico de diferencial (XDS), las funciones del bloqueo transversal del eje delantero, así como la suspensión adaptativa (que es opcional y cuesta 900 €).

Un coche de este tipo donde sin duda se disfruta más es en carreteras, sean con muchas curvas o pocas. Es seguro, dinámico, potente y con esas sensaciones de llevar un deportivo. Lo probamos subiendo a Santa Fe del Montseny por Viladrau, una magnífica carretera para disfrutar del GTI, y vaya si se disfruta...

Pero claro, depende de lo 'pesado' que tengamos el pie, luego nos encontraremos con mayor o menor consumo. El dato que ofrece la marca es un consumo combinado de 7,3 litros a los 100 km, y hay que decir que aunque en carretera de curvas el consumo se incrementa, en nuestro recorrido completo, incluyendo autopistas aunque no ciudad (cada vez es más difícil entrar en ciudades como Barcelona con coche), nos dio alrededor de los 8 litros, y no fuimos a paso de tortuga para entendernos, pero sí pensando en que el consumo y las emisiones debemos controlarlas tanto como podamos como usuarios, y aprovechar al máximo la tecnología que ofrecen los fabricantes. Y es que unas emisiones de 166 gr/km de CO2 es una cifra impensable hace no muchos años para un vehículo de estas características.

FICHA TÉCNICA

Motor: Gasolina 1.984 cm³

Aceleración 0-100 kms/h: 6,3 seg

Consumo combinado: 7,3 litros/100 km (en la prueba 8)

Emisiones de CO2: 166 gr/km

Normativa de emisiones: Euro 6

Maletero: 374/1.230 litros

Peso: 1.463 Kilos

Potencia máxima: 245 CV (180 kW) entre 5.000 y 6.200 rpm

Par máximo: 370 Nm a 1.600-4.300 rpm

Cambio: DSG automático de 7 velocidades

Tracción: Delantera

Dimensiones: Largo 4.287 mm, ancho 1.789, alto 1.478, batalla 2.627

Precio de esta unidad: 45.400 € (más 900 € techo panorámico)